Foto: UD IBIZA
El Ibiza sufrió la primera derrota del verano ante un Albacete muy superior en el segundo partido de preparación celeste, disputado en La Nucía. El conjunto de Guillermo Fdez. Romo, con la única baja de Rubén Díez, evidenció que se encuentra en fase de construcción. Debutaron los últimos fichajes: Pepe Sánchez, Argüelles y Eugeni.
El ensayo de pretemporada de ayer del Ibiza ya empezaba con algún contratiempo, pues tuvo que retrasarse una hora (20h) debido a imprevistos del viaje a tierras alicantinas. No mejoró para un equipo totalmente nuevo como es el de Romo, saltar al campo y enfrentarse al bloque revelación de la temporada pasada de #LaLigaHypermotion, que apenas ha sufrido cambios, juega de memoria, y cuenta con unos jugadores y entrenador de alto nivel. Y es que los celestes, que estrenaban la tan bien acogida segunda equipación negra con banda azul, se vieron superados por los manchegos desde el primer minuto hasta la pausa de hidratación (minuto 25) en todas las facetas del juego.
En un XI con novedades en la portería (Fabricio), en defensa (Medina y Olaortua) y medio campo (Olabe y Eugeni), con nuevo capitán (Escassi) pero con el mismo tridente de ataque Suli-Obolskii-Abde, los de Romo estuvieron a merced de un Albacete de presión alta que no permitía a las nuevas líneas del Ibiza engranarse. El equipo no cogía el ritmo y el rival no daba espacios; Jesús Álvarez apenas podía iniciar jugadas y la defensa obligada a estar vigilante y exigida, incluido el portero Fabricio, que protagonizó dos salidas fuera del área. La segunda de ellas, en el minuto 15, con el peor desenlance: un penalty por atropello al delantero Bolívar, que se tuvo que retirar lesionado. Pena máxima pues, para el 11 albaceteño y conjunto ibicenco, que encajaría desde los once metros el gol, obra de Manu Fuster, el mejor de la primera parte. Antes (minuto 13) ya había avisado con una falta desde la frontal que desvió a córner con inseguridad el propio Fabricio. El veterano guardameta, a prueba en el Ibiza, no tuvo su mejor día. Aún hubo una ocasión más entre la falta y el penalty, puesto que en el córner mencionado, Riki remató dentro del área, pero su lanzamiento cruzado se marchó rozando el palo. Más allá de las conducciones de Abde, lo único destacable por parte del Ibiza fue ver cómo Eugeni va a ser el encargado de ejecutar cualquier acción a balón parado, pues lanzó todos los saques de esquina y todas las faltas en campo contrario.
Les vino bien a los soldados de Romo la pausa de hidratación, ya que les permitió realizar los ajustes que recibieron del cuerpo técnico y el último cuarto de hora de la primera parte el Ibiza adelantó las líneas, colocó a Abde en punta y acostó a Eugeni a la izquierda; a Suli lo cambió de banda y el equipo presionó más arriba. Fruto de esa presión fue la ocasión más clara del partido, un zapatazo con el interior de Jesús Álvarez desde la frontal tras una pérdida en la salida de balón del Albacete, que rechazó el portero Altube.
Tras el descanso, carrusel de cambios: Rubén Albes cambió el once por completo, mientras que Romo reemplazó al portero y los centrales, además de Abde, dando entrada a Sequeira, Pepe Sánchez, Bobadilla y Tienza, reforzando así el medio campo con tres interiores y liberando a Eugeni y Suli. Obolskii, sin recambio aún en la plantilla, continuó como referencia. Tuvo más presencia con balón el Ibiza (buenas maneras de Pepe Sánchez en la salida de balón) pero la única ocasión llegó de un libre directo de Eugeni. Los cambios se sucedieron y los celestes acabaron con Eugeni rodeado de juveniles que están participando en la pretemporada ibicenca y encajando un gol en el minuto 87 en una acción defensiva errática a nivel colectiva, desde la colocación con el balón a la espalda, pasando por los duelos de la jugada y finalizando en el marcaje a Neco, que remata de manera extraordinaria.
En definitiva, no es tiempo para sacar demasiadas conclusiones y sí para que vayan fluyendo y creciendo esas relaciones en el vestuario y el césped que espera Guillermo Fernández Romo. Tiempo para conocerse y adquirir automatismos, por lo menos para el inicio de la competición (un mes justo) es lo que necesita un Ibiza que tendrá la oportunidad de ponerlo en práctica en Can Misses, por partida doble, frente a la Penya Independent (sábado a las 20h) y el Formentera (4 de agosto), ambos conjuntos de Segunda Federación.